Para empezar.

Según el dicccionario, la definición de lebrillo es: Vasija hecha de barro vidriado, más ancha por el borde que por el fondo, y que se emplea especialmente para lavar.



Pues bien, os preguntaréis que tiene que ver un lebrillo con un blog sobre juegos y literatura infantil y juvenil. La explicación no es otra que la que sigue:



Mi abuela vivía en un pueblo de Andalucia, todas las mañanas llenaba con agua del pozo un enorme lebrillo que tenía en el patio y dejaba que el agua se calentase al sol durante todo el día. Por la tarde, metía en el lebrillo a sus hijos y los bañaba mientras les contaba una historia.



Pues bien, eso es lo que os propongo, que les contéis una historia a vuestros hijos cada día. Y como días hay muchos e historias aún más, iré colocando en este blog los títulos que más me gustan y os iré comentando detalles de mis autores e ilustradores favoritos.











Para los más pequeños

Encontraréis una entrada con este título, en ella quiero colocar sugerencias de literatura para los más pequeños. Esto no quiere decir que a niños de más edad no sigan gustándole estos cuentos.
Son historias cortas.
Seguro que ya habéis comprobado que a los niños a partir de los dos años, algunos incluso antes, les gusta que repitamos el mismo cuento una y otra vez, esto es así porque les da seguridad conocer de antemano lo que va a ocurrir.
De la misma manera si queremos utilizar un cuento para ayudar al niño a vencer alguna dificultad, como por ejemplo un miedo, debemos leerle el cuento repetidas veces, durante varios días, de esta manera vamos a conseguir que se identifique con el personaje en cuestión y con su manera de resolver el conflicto.